martes, 8 de marzo de 2011

Sabia de...

Sabía del que rumoraba entre las ventanas,
Su rostro oculto tras las luces lejanas susurraba cada vez más fuerte,
Entre sus dientes alojaba ninfas que volaban más allá de las intrigas,
Sus palabras fueron el ventarrón que elevo mis plegarias.

Sabia del que lloraba tras la silla olvidada,
Acurrucado entre sus sollozos todavía soñaba,
Cada lágrima que recorría su rostro hacía de su olvido el consuelo,
Encogido seguía creyendo en promesas inexistentes.

Sabía de la ávida tejedora de historias tras mi cama,
sus palabras llenaron sueños ajenos noche tras noche,
sus manos translucidas guiaban los eslabones de una historia sin final feliz,
siempre cuido de señales olvidadas y retazos del destino.

Sabía de todos ellos mientras jugaba con la pluma,
Sabía que estaban allí mientras escribía las últimas letras,
Sobre un papel que se esfumo con el tierno adiós,
Un papel que se llevó un final feliz en medio de tejidos, sollozos y rumores.

Lyra

1 comentario:

✙Eurice✙ dijo...

Que hermoso llorar tras una silla olvidada, me ha encantado esa parte.
Gracias por visitar mi oscuro desván.
Saludos!